Nacida de las cenizas de Lifelover, la banda sueca Kall editó el pasado mes de noviembre su disco debut. Así que nuestro redactor Fernando Acero se puso en contacto con el grupo para conocer más acerca de su actualidad.
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-Kall es el nombre del nuevo proyecto musical fundado por los miembros de Lifelover. ¿Qué queda de la banda anterior y qué nuevas ideas exponéis en este conjunto?
Más allá de, obviamente, tener el mismo cantante, nuestro bajista Fix se encarga esta vez de las guitarras rítmicas y H. se mantiene como solista del conjunto, aunque en general variamos nuestros roles en estudio o cuando ensayamos dependiendo de las metas que nos marquemos en una canción en particular por tal de hacerlo sonar todo lo mejor posible. No hay límites o reglas en lo que aspiramos a expresar, e intentar describirlo sería limitarlo, así que preferiría decir que aquellos que saben esperar y ver serán recompensados.
-Una de las primeras cosas que me ha impactado escuchando vuestro debut – el cual puede ser escuchado de forma gratuita en vuestro Bandcamp– es la evolución estilística y sonora respecto a vuestros trabajos anteriores. ¿De dónde nace la inspiración para crear estos nuevos temas?
Todos nosotros tenemos vidas distintas que nos llevan a distintas partes del mundo y más allá, por lo que la inspiración nos llega de formas distintas.
-Habitualmente soy el primero en denostar las etiquetas, pero me resulta muy impactante la diversidad que encontramos en vuestro LP. Es fácil percibir elementos ambientales, progresivos y post-rock en temas como “Varelsen” o “Far Väl”, lo cual contrasta absolutamente con otras composiciones como “Descending Ascension” o “En Ljusare Morgondag”, repletas de agonía y oscuridad. ¿Cómo abordáis esto en el proceso compositivo? ¿Tenéis alguna filosofía en particular al respecto?
Llegamos a acuerdos sobre lo que encaja mejor cuando ensayamos y desarrollamos los conceptos desde aquí para hacerlos tan interesantes y útiles como nos sea posible, hasta que expresamos tanto como podamos en el reino de cada composición, de tal modo que el álbum se convierta en un concepto global, completo.
-La etiqueta “progresivo” parece ser muy popular en los últimos años. ¿Os sentís esa clase de banda por plantear composiciones algo más largas y complejas o creéis que el uso de ese término es abusivo?
Es un término con el que la mayoría de personas no se sentiría cómoda conviviendo a menos que se lo propusiesen, más que una palabra que utilizan las personas cuando se enfrentan a algo nuevo o diferente. Mientras los artistas en cuestión se esfuercen en evolucionar sin atajos y creen algo verdaderamente personal, se les puede considerar progresivos. De todos modos, nada es abusivo siempre que lo dejes fluir. A fin de cuentas, es algo que acaba dependiendo del receptor.
-Hablando de composiciones, ¿cómo es el proceso de composición habitual de vuestros temas? ¿Trabajáis juntos en ellos o hay alguien que tome la iniciativa?
Somos todos multiinstrumentistas, así que siempre hay muchas formas de compartir nuestras ideas cuando ensayamos, actuamos en vivo y grabamos. Está claro que siempre hay alguien que tiene que empezar, pero todos estamos bastante seguros de lo que queremos expresar. Tal vez esa sea la razón por la que nuestra formación actual funciona tan bien.
-Me gustaría preguntaros sobre vuestras líricas. ¿Qué dirección habéis decidido tomar en este trabajo? ¿Qué temáticas tratáis?
Creo que es importante compartir y expresar conceptos abstractos y metafóricos por tal de que los receptores puedan crear su propio significado e impresión sobre las palabras que utilizamos para las canciones o para los títulos de las mismas. Siempre hay una gran necesidad y valor en el hecho de dar y recibir una educación, y no sólo a nivel vivencial, sino espiritual. Educarte a ti mismo y a los demás sobre cosas que no pueden ser vistas o percibidas por algunos. Compartir algo que no es sólo una acción, sino que puede ser una inspiración para actuar.
-¿Cómo fue el proceso de realización y producción del álbum? ¿El resultado es el que esperabais o ha superado vuestras expectativas?
Con cada uno de nuestros discos ha habido y habrá obstáculos, como en la mayoría de cosas de esta vida. Pero esa es una de las cosas que resulta más gratificante para todos nosotros. Siempre hay algo nuevo o especial que podemos aprender por tal de mejorar nuestros temas y nuestras producciones. Las expectativas existen por tal de ser sobrepasadas. De no ser así, no tendrían sentido.
-Hablando de expectativas: ¿cómo está siendo la recepción por parte de vuestros fans? ¿Están siendo muy duros con vuestro nuevo material o les está agradando?
Ha sido un buen principio.
-¿Tenéis pensado realizar alguna gira internacional o el hecho de formar parte de algún festival? Porque francamente, sería genial veros por España.
No conocemos a ningún promotor español, pero nos encantaría actuar ahí si alguien nos ayudase a montarlo. Por el momento sólo podemos empezar por Europa central. Estamos bastante limitados a la gente que nos contacta para tocar en vivo donde ellos nos dicen o a los sitios en los que hemos tocado anteriormente.
-¿Qué planes de futuro tiene Kall más allá de lo comentado anteriormente?
Nuevos lanzamientos mostrando nuestras diversas facetas, tanto como compositores o como banda – siempre que nos sea posible. Siempre que no estemos en el estudio o ensayando, intentaremos estar el mayor tiempo posible en la carretera.
-¿Está entre alguno de esos planes algún nuevo proyecto paralelo a la banda?
Ya que se acerca el décimo aniversario de Lifelover haremos unos cuántos conciertos especiales en 2015 alrededor del mundo.
-¿Qué hay de Hypothermia? ¿Hay alguna posibilidad de que volvamos a ver nuevo material del conjunto?
Por el momento están muy activos y planean lanzar por lo menos un nuevo álbum en 2015 junto a un EP que contiene material inédito. Dichos trabajos contarán con colaboraciones especiales.
Entrevista por Fernando Acero.