¡Primera crónica del año! El sábado pasado nuestro redactor José Oro se desplazó a Valencia para vivir una estupenda noche de metal a cargo de Quelonio y Ariday. Noche que nos relata a continuación.

¡No te pierdas esta crónica!

 

 

Cualquier excusa es buena para salir de tu cuidad, pero si es para ver a dos bandas emergentes del panorama nacional, la excusa es perfecta, con lo cual pillamos el ave y nos plantamos en Valencia para ver a Quelonio presentar su último trabajo “Dogma” y a los zaragozanos Ariday.

Tras una amena cena con ambos grupos, partimos hacia la sala que ya lucía un buen ambiente, no se llenó pero es que eso hoy en día es una quimera.

Los primeros en saltar fueron Ariday, que están en la gira de su décimo aniversario, pero que presentaban una baja en el grupo, ya que la fiebre causó estragos en su bajista y les ayudó un amigo suyo de Valencia, que en una semana se aprendió su último trabajo “Un último Despertar” que a la postre fue lo que tocaron, el disco entero de principio a fin.

Comenzaron con la intro “Tras la Tormenta” tras la cual sonó “Intentaré Escuchar” en la que Yadiraentróa escena y no se limitó al escenario, ya que frecuentemente bajaba del mismo para mezclarse entre el público mientras cantaba. También sonaron canciones como “Ese Dios”, “No llores Más por Mí”, la balada “Tocar el Cielo”.

Destacar también el trabajo vocal de Súper a las voces guturales en bastantes partes del concierto, que daban el contrapunto a la voz de Yadira. Con “Juicio Final” se despedían del público ya totalmente entregado a la banda prometiendo volver pronto.

Tras una breve pausa, salían a escena Quelonio con el tema que abre su último trabajo “Dogma, “Hoy Ganaré”. Con un público, aunque no muy numeroso, pero totalmente entregado al grupo, la banda enlazaban con “Justo a Tiempo” para tras una presentación volver a su segundo disco “Vicio y Virtud” y tocar mi tema favorito de la banda y con el que los conocí, “V”.

Fueron alternando canciones de sus anteriores trabajos y del último, que tocaron entero, “Solo quedas tú”, “Enterrada en Dunas”, precedieron a temas como “Tormenta” o “Juego de Miradas”. Destacar lo compacto que sonaba y el buen sonido de la sala les acompañaba, la base rítmica de Juan a la batería y Raúl al bajo, hacía que los dos guitarristas, Jose y Emilio sonasen a cañón, y qué decir de Teresa, una extraordinaria cantante y frontwoman que sabía por dónde llevar al público haciendo que cantasen temas como “Por la Espalda” o “La Bestia”. Hasta se atrevieron con un tema que es todo lo contrario de la banda, “Viernes” y lo bordaron.

La parte final del show fue todo un reto para nuestros doloridos cuellos y nuestras ya tocadas cuerdas vocales, la versión de “Cuerdas de Acero” de los barones, “Castillo de Satán” y el apoteosis final con “Ave fénix”. Se despidieron tras tocar 21 canciones y más de hora y media de show, lo cual en estos tiempos es más que de agradecer.

Tiempo de agradecimientos, a Quelonio y Ariday por hacerme pasar una tarde noche de risas como pocas, la gente de la sala Paberse por las facilidades a la hora de hacer mi trabajo y a mucha gente que coincidimos tras conocernos solo en redes sociales, hasta pronto.

Crónica y fotos: José Oro