Los días 21, 22 y 23 de junio tuvo lugar en Clisson una nueva edición del Hellfest, aquí os dejamos la crónica del sábado, en la que un montón de bandas se pasaron por los seis escenarios del festival, y en la que Kiss fueron los cabezas de cartel.

¡No os perdáis la crónica y fotos de NachoGS!

 

 

Comenzamos la segunda jornada del Hellfest en el Main Stage 1 con la actuación de Richie Kotzen, pudimos disfrutar de la maestría del guitarrista norteamericano en temas como “Bad Situation” o “Help Me”, antes de la cual aprovechó para presentar a su banda actual, formada por el bajista Dylan Wilson y el batería Mike Bennett. Además de su virtuosismo a la hora de tocar, también destacó la sensibilidad de Kotzen a la hora de cantar, a pesar de que un gran festival como el Hellfest, no sea el lugar más idóneo para disfrutar de la música del guitarrista, su fusión del hard rock, el funk y el blues, fue muy bien recibida por el público que se acercó a ver su actuación.

Cambiamos radicalmente de estilo y nos acercamos hasta el escenario Temple, para ver la actuación de Carach Angren. los holandeses nos ofrecieron una buena dosis de su particular black metal sinfónico. Saltaron al escenario con sus habituales caras pintadas y con el vocalista Seregor, ejerciendo como oscuro maestro de ceremonias. En su terrorífico show sonaron temas como “Charlie”, la sangrienta “Blodd Queen” o Bloodstains on the Captain's Log.

Turno ahora para los portugueses Moonspell, que lograron una comunión perfecta con el público, comenzando con “Em Nome Do Medo”, Fernando Ribeiro apareció ataviado con un sombrero de ala ancha en la cabeza y un candil en la mano. Fueron sonando temas como, “1755” “Opium” y “Alma Mater”, casi sin darnos cuenta y tras cincuenta minutos de actuación, se despidieron con la celebrada “Full Moon Madness”, cerrando así un buen concierto.

Volvemos al escenario principal para ver lo que es capaz de ofrecer Whitesnake en la actualidad, pudimos disfrutar de un set-list con clásicos de la talla de “Bad Boys”, con la que comenzaron, “Slide It In” o “Here Are Going Again”. David Coverdale sigue llenando el escenario con su carismática presencia y defendiendo los temas de forma digna, eso sí, apoyado siempre en los coros por toda la banda y sin llegar, ni por asomo, a los tonos más altos.
En un concierto de una hora de duración, los solos que incluyeron fueron innecesarios, aunque cualquier respiro extra le viniera de perlas a Coverdale, para terminar la elegida fue “Still Of The Night” que logró dejarnos un buen sabor de boca.



La música no para en el Hellfest, continuamos con los holandeses Within Temptation, que nos ofrecieron varios temas de su último trabajo, "Resist", como “Raise your Banner” y “The Reckoning”, con las que comenzaron su concierto. En frente del escenario unos cañones escupían fuego caldeando aún más el ambiente, el concierto fue bastante lineal y a la hora de despedirse con el clásico de la banda “Mother Earth”, fue cuando lograron la mejor respuesta por parte de la audiencia.

Turno de uno de los platos fuertes de la jornada, Def Leppard comenzaron su concierto con “Rocket”, “Animal” y “Let It Go”, que sonaron genial. A mitad de concierto la empalagosa “Two Steps Behind”, con Joe Elliott acústica en mano, seguida de “Love Bites”, hicieron que se bajaran las pulsaciones, quizás demasiado. En la recta final “Pour Some Sugar On Me”, “Rock Of Ages” o “Photograph” volvieron a poner las cosas en su sitio.

Ahora Billy Gibbons, Dusty Hill y Frank Beard., o lo que es lo mismo, los legendarios ZZ Top saltaban al escenario del Hellfest para repasar sus grandes éxitos, como la inicial “Got Me Under Pressure”,“Gimme All Your Loving” o “My Head's in Mississippi”.

Los de Texas siguen fieles a su estilo, conservando la formación original y su característico sonido. Una banda imprescindible en la historia del rock , que cerraban su elegante actuación en Clisson con dos de sus himnos, “La Grange” y “Tush”.

Y llegaba el momento de los cabezas de cartel de la jornada, los norteamericanos Kiss, en su supuesta gira de despedida. A las once de la noche caía el telón y comenzaba un gran espectáculo visual y sonoro, con unas espectaculares luces y un sonido limpio. En el repertorio no faltaron los temas más clásicos, comenzando con “Detroit Rock City” y “Shout It Out Loud”. Tampoco faltaron los habituales números que tan buenos resultados les ha dado a lo largo de su carrera, como la sangre que escupe Gene en la introdución de “God Of Thunder” o el vuelo sobre las primeras filas de Paul, durante “I Was Made For Loving You”.

Paul Stanley domina los tiempos y a la concurrencia como nadie, sigue siendo un gran frontman, aunque los años no pasan en balde y su voz ya ha perdido el brillo de antaño.Tampoco faltaron en este concierto los socorridos solos de batería y guitarra, ni la interpretación de la balada “Beth”, a cargo de Eric Singer a la voz y al piano. A la hora de terminar la fiesta tampoco hubo sorpresa, sonaron “Crazy Crazy Nights” y “Rock And Roll All Night” entre una lluvia de confeti, poniendo así el punto final al espectáculo.

Y de este modo concluía para nosotros la segunda jornada del Hellfest, tocaba retirarse a descansar para afrontar al día siguiente la tercera y última jornada.

Crónica y fotos: NachoGS